La cadena de hamburguesas Burger King ha decidido autoflagelarse en plena Semana Santa. Experimentar en Sevilla una campaña irreverente que mezcla lo sagrado con lo vegano. Y no le ha salido bien la jugada pues la conversación social ha generado en casi 25.000 tuits y una llamada al #BoicotBurgerKing.

La creatividad en cuestión viene a convertir una llamada a estos establecimiento en la misma Sagrada Cena. Haciendo juegos de palabras con la frase que pronunció Jesús en su bendición «Tomad y comed, porque este es mi cuerpo». Pero llevado al estilo vegano, a quienes comen ‘100% vegetal, 0% carne’.
Cuestión que se ha revelado, en opinión de los ofendidos, como una falta de respeto a los costumbres y tradiciones. Y que ha provocado un intenso debate en la redes sociales. Un impacto reputacional que no han sabido medir, y que ni siquiera va a remontar ni el «Domingo de Resurrección».
Así, el máximo responsable de VOX en el Parlamento Europe, Jorge Buxadé, lamentaba «ver los logos de las multinacionales menospreciando frívolamente nuestra fe y las tradiciones de miles de españoles». Comentario que ha provocado la mención del su compañero Herman Terstch ahondando que el anuncio, por «miserable», merece todo «el desprecio».
Las voces críticas se han levantado también en el mundo el clero. Sacerdotes con con muchos seguidores en esta red social también pusieron la voz en el cielo. El influencer @patergongora, que suma 46K, como respuesta al anuncio aconsejaba a sus seguidores «que no vuelvan a ir nunca a un establecimiento vuestro. A ver si así aprendemos a respetar».
Como de todo hay en la viña del Señor, pero esta vez parece que la broma no ha tenido gancho ninguno. Más bien todo lo contrario.