Arancha Ruiz es una headhunter especialista en potenciar tu marca personal. Está convencida de que todos y todas llevamos un talento único, valioso, diferenciador. En «Ahora o Nunca» te ayuda a descubrirlo, pulirlo hasta hacerlo brillar y/o cómo seguir potenciándolo. Su lectura es una oportunidad de calidad para triunfar en la carrera profesional; en el camino de la vida con sus palancas y frenos, oportunidades y áreas de mejora, en el éxito y las crisis que te ayudan a crecer.
Estamos en la sociedad del conocimiento, con la generación más preparada de la Historia, pero aún así hay una sensación real o creada de dispersión o mediocridad. ¿Cómo se activa la palanca de la confianza en el cambio a mejor?
Las noticias negativas atraen más porque enlazandirectamente a las emociones y a cómo procesamos la información. Nos ponen en alerta. Sin embargo, el exceso provoca el efecto contrario: la inacción. Porque si la persona cree que el problema es inabarcable, que no podrá hacer nada por evitarlo, entonces cae en la apatía o se deja llevar.
Sin embargo, la historia está llena de ejemplos de personas aparentemente insignificantes que creyeron que el cambio era posible, y lo lograron. Personas vulnerables que no sabían si iban a triunfar y a pesar de ello lo intentaron. Ahora o Nunca habla de que estos héroes habitan en cada uno de nosotros y que, cuando superan las adversidades de la vida cotidiana, generan un cambio positivo para todos.
Defiende usted que cada persona tiene talento, es un crack. Pero que brille y lo convierta en luz transformadora en qué tanto por ciento depende de ti y de la sociedad en su conjunto.
El peso del entorno es muy grande. Por eso es tan importante ubicar el talento en su mejor elemento. Si ubicas a una persona en un sitio donde es apreciada y tiene recursos para desarrollarse, crece inmensamente aportando valor a todos. Sin embargo, cuando está en un sitio tóxico, donde no le quieren ni le dejan hacer, su talento se mustia e incluso muere. Es obligación de todos, líderes, seleccionadores y también de los propios profesionales, promover que cada talento esté en su mejor lugar. Fíjate que todos mis libros, “El Mapa de tu Talento”, “Ahora O Nunca” y “Qué Busca el Headhunter” tratan de ayudar a lograr esa ubicación óptima.
¿Tenemos el poder de darle la vuelta a nuestra vida personal y profesional?
Siempre que apliquemos la inteligencia práctica: “lograr los objetivos que se pueden en el entorno en el que se habita con los recursos que se tienen al alcance en el momento en el que se vive”. El éxito es alcanzar el equilibrio entre lo que se tiene, lo que se puede, lo que se quiere y lo que se hace.
Y para ello, tenemos que decidirnos “Ahora o nunca” de saltar el muro del pesimismo y quitarle el “freno de mano” a una serie de miedos …
Existen dos grandes errores en el talento: el primero es creer que la oportunidad que pasa se puede posponer y que habrá otra. El éxito nunca es resultado de una única acción, sino de una suma de decisiones acertadas. Hay que aprovechar CADA AHORA.
El segundo, es creer que “posponerse” es un gesto de generosidad hacia los demás. Es justo lo contrario. Cuando una persona no aprovecha una ocasión perjudica al resto, porque su falta de crecimiento y realización es una pérdida que afectará a todos a largo plazo.
Y una vez superados esos miedos ya podrás situarte en el “kilómetro cero” para ser dueño de tu triunfo en la carrera profesional. Lo primero será encontrar “oportunidades de calidad”. ¿Cómo conseguir que estén “a la vuelta de la esquina”?
En el libro Ahora o Nunca describo con detalle las siete palancas que ayudan a impulsar al talento y que son muy conocidas por todos. Lo que ocurre es que a veces la inercia nos hace olvidarnos de ellas. Estas son: tomar perspectiva, ponderar la información, capacitarse, encontrar aliados clave, mantener la confianza en uno mismo, construir marca personal.. y ¡actuar!. El talento es acción, sin acción no hay talento, sino promesa de talento.
¿Y cómo aprovecharla? ¿Es solo una cuestión de actitud?
Todos tenemos miedo. Todos nos sentimos vulnerables y dudamos si aquella es la oportunidad correcta que estamos esperando, a todos nos ataca la inseguridad de si seremos capaces de aprovecharla o si en cambio terminaremos peor de cómo empezamos. También nos cuesta mantener el foco: estamos en miles de frentes propios y también ajenos. Y, a pesar de estar conectados a cientos, incluso miles de personas, nos sentimos a veces solos y aislados. Todas esas dudas e inseguridades nos hacen quedarnos inmóviles, esperando. Por eso vencer la inercia es algo más que actitud, es tener capacidad, visión del momento, ponderar, contar con aliados, mantener la autoconfianza y contar con la protección de una marca personal por si nos equivocamos. Y no somos súper-heroes con esos súper-poderes en continuo. No es necesario. Lo importante es que seamos capaces de hacerlo en UN MOMENTO, en el instante del AHORA que será un punto de inflexión trascendente para el resto de nuestra vida.
¿Por qué sostiene que este proceso le puede llegar a costar más a las mujeres, que tendrán que “superar a más adversarios de género”?
Como consultora de talento he trabajado con hombres y mujeres por igual, y puedo asegurar que los frenos afectaban indistintamente a unos y otros. Sin embargo, las mujeres notaban más sus efectos y tenían que esforzarse más por superarlos. Buscando respuesta a esta reacción dispar, identifiqué tres adversarios de género que justificaban esta diferencia. Las mujeres, de promedio, somos más inseguras que los hombres. Además, tenemos una mayor inclinación a agradar, ya que leemos mejor en el rostro humano el aprecio y el desagrado. Y por último, nuestro cortisol se dispara más que el del hombre antesituaciones de conflicto que ponen en riesgo una relación social. Conociendo estos tres factores noes de extrañar que nos cueste romper con la inercia más que a los hombres, aunque como siempre, hay casos singulares en ambos sexos.
Y una vez trazado todo este camino, que no destino, te habrás convertido en un héroe …
Mi mayor heroicidad es ayudar a estar personas a identificar su mayor talento, encontrar su lugar y hacerse con los recursos para triunfar. Su éxito es mi éxito. Y sobre todo, en compartirlo con otros, como los lectores de esta publicación, para que ellos también puedan seguir creciendo su talento.
Una última pregunta, a modo de modelo de éxito, ¿Cuáles han sido los puntos de inflexión críticos que te han hecho ser la profesional que quieres eres y la que quieres llegar a ser?
Conectar con el IE fue desde luego un punto de inflexión relevante. Me entroncó con el sector de la educación y me contagió el afán emprendedor e innovador. Posteriormente convertirme en head-hunter cuando la crisis se iniciaba y comprender que la marca personal sería un elemento diferenciador para ayudar a impulsar el talento fue otro gran punto crítico. Y después, aprender y ganar confianza a través del apoyo de cada una de las personas trascendentes de mi vida: mi familia, mis amigos, mis colaboradores, mis colegas y mis clientes. Todas estas personas han creído en mí y lo que soy se lo debo a ellas.