El acuerdo entre PP y PSOE que durante décadas se daba por bueno para elegir la figura del Director de la Corporación, se desempolvará por el equipo de Jorge Azcón para insuflar nuevos vientos en la Corporación Aragonesa de Radio y Televisión. De esa manera pretenden restaurar el sistema de elección anterior, evitando así anomalías que llegaron de la mano de Podemos al iniciarse la pasada legislatura. Se eliminan de esta manera los concursos de méritos y competencias que tantos quebraderos de cabeza han traído a la profesión. Se pone así fin a esa etapa de “manoseo” en Aragón TV.
El proceder que ahora se elimina le ha costado a la Corporación incluso algún pleito por discrepancias a la hora de las valoraciones subjetivas de méritos en los procesos para proveer unos puestos profesionales muy concretos.
En el fondo subyace la idea de evitar los diferentes modos de “comisariado político” que se venían ejerciendo al conceder al representante del Consejo Asesor de la Corporación, voz y voto en el Consejo de Administración. Se vulneraba, con esas atribuciones, la esencia de esa figura. Ahora se pretende mantener con voz pero ya sin voto, como parece más lógico, limpio y trasparente por otra parte.
Adiós a los trajes a medida
Este proceder lógico va a evitar que se troquelen concursos y se vuelva a dejar en criterios más subjetivos que otra cosa la elección de la figura del Director de la Corporación. Se garantiza así una mayor trasparencia y se cercena cualquier posibilidad de influir desde fuera como ocurría en la actualidad. La idea es acabar con los “trajes a medida” que se estaban confeccionando en la época de Querol.
Lo que está claro que, por encima de los nombres, Azcón busca las trasparencia y depositar la confianza en un profesional que lleve a buen término la dirección de la Corporación tras unos años de zozobra. Ni las audiencias favorables han ayudado a dar ese soplo de aire fresco que está pidiendo a gritos tanto la televisión como la radio. A esta realidad no resulta ajena la coalición PP-Vox y parecen ya dispuestos a subsanar sin interferencias tan palpables como las que ahora se eliminan. Los tiempos del manoseo informativo van a formar parte del pasado. Bienvenido el aire puro, se agradece.
