Visitar una bodega histórica es como adentrarte en el almacén de pinturas de una gran pinacoteca, digamos El Prado o el Hermitage. Con paneles perfectamente alineados, a veces solo reservado a la atenta mirada de investigadores y estudiosos, donde uno puede deleitarse de grandes obras del arte universal que salen momentáneamente a la luz como testigo de la gloria creativa.
En este sentido, si cambiamos marcos por botas, estofados dorados por roble americano o castaño, el director de conservación por Armando Guerra; si hacemos ese ejercicio, solo entonces estaremos en Barbadillo.
Una manera de entender la tradición y el compromiso con una historia de oro Fino, con uno de los yacimientos arquenólogicos del marco Jerez. Arqueología y vanguardia de una manera de entender la vida, el vino en la búsqueda incesante de una verdad milenaria.
Y con ese motivo, la curiosidad del «solo sabe que no sé nada», nos adentramos un buen puñado de #SherryLovers en el templo con aires de Catedral de Barbadillo. Pasamos por el Grial de la Bodega, su sacristía; nos explicaron el proceso de recuperación del histórico Vermuth Atamán, la importancia para el paladar el devenir de la empresa del producto franquicia «Castillo de San Diego», la elaboración de la manzanilla AS y Trinidad (delicioso buque insignia, tal y como aquella nave Santa que hace 500 años salió de Sanlúcar para dar la primera vuelta al mundo).
Nos adentramos también en el concepto poético de «Mirabrás». Fino situado en el «crucero central» de la Bodega Catedral, que a modo de cantiña (suave y sonora en el paladar de los buenos aficionados), cruza las botas de poniente a levante, es decir, desde las viñas hasta el mar de Sanlúcar; tierra y sal.
Rematamos la visita con vinos generosos. Luego se complementó la jornada con una experiencia gastronómica marca de la casa «El Guerrita», con buen vino y mejor fritura. Agradecemos al periodista enogastrómico David Puerto su iniciativa y que haya incluido a Extradigital en su apuesta por dar a conocer las singularidades del vino de nuestra tierra.