- En octubre entra en vigor la nueva operativa que dejará al taxi tradicional como la única opción en Barcelona.
- “Que levante la mano el que quiera volver a viajar sin saber cuánto va a pagar”, reza una de las publicidades de Cabify que pueden verse estos días por las calles de la Ciudad Condal.
El 1 de octubre entra en vigor la nueva normativa que impedirá seguir operando a las VTC y que dejará al taxi tradicional como la única opción en Barcelona. Cabify ha desplegado este verano una campaña que trata de poner de manifiesto las consecuencias negativas que tendrá para los usuarios. “Que levante la mano el que quiera volver a viajar sin saber cuánto va a pagar”, reza una de las publicidades que pueden verse estos días por las calles de la Ciudad Condal. “Que levante la mano el que quiera volver a hacer cola para moverse por la ciudad”, reza otra. “Que levante la mano el que quiera buscar un taxi de madrugada”,leemos en otra, y así sucesivamente.
Los textos, en catalán y en castellano, tratan de dejar constancia de que Cabify, que lleva una década operando en la ciudad, desea seguir haciéndolo. Una reciente encuesta que ha recopilado varios miles de respuestas, apunta a que el grado de satisfacción de sus usuarios se sitúa por encima del 9,5. De hecho, Barcelona es una de las urbes en las que obtiene una puntuación más alta.
