- El dinero recaudado será íntegramente destinado a la compra de material para el Hospital Universitario de Burgos.
- Es una iniciativa de Bodegas Arzuaga y el Club de Baloncesto San Pablo Burgos frente a la crisis sanitaria del COVID-19.
«No estáis solos. Gracias». Es el mensaje que puede leerse en las camisetas solidarias de Amaya Arzuaga. Para la creación de esta prenda, la diseñadora burgalesa, referente nacional e internacional en el sector, ha contado con la colaboración del San Pablo Burgos. Así, el mundo del deporte –representado por el Club de Baloncesto– y el de la moda se unen dentro de la línea de acciones que está llevando a cabo Hotel & SPA Arzuaga y Bodegas Arzuaga desde el inicio de la crisis sanitaria.
Según informan desde la web del Club de Baloncesto San Pablo Burgos, las prendas, de edición limitada, tendrán un precio de 6 euros, con tallas disponibles desde la S hasta la XXL. Se pueden reservar en pre-venta a través de la tienda online del San Pablo Burgos. Una vez lanzadas al mercado, los beneficios irán destinados de forma íntegra a la compra de material para el Hospital Universitario de Burgos (HUBU), en plena emergencia sanitaria por la COVID-19.
La empresa bodeguera, patrocinador oficial del club burgalés, transmite, a través de estas camisetas solidarias de Amaya Arzuaga, un mensaje de solidaridad. Con él quiere recodar la importancia de no olvidar a las personas mayores y pacientes afectados por la enfermedad, así como a los colectivos más vulnerables.
Cuando finalice el confinamiento, las prendas de ropa podrán recogerse en la oficina del Club de baloncesto en Burgos (calle Juan Albarellos, 2, 1º). Para ello será necesario el justificante de compra. También existe una opción para recibirlas a domicilio, sumando al precio total los gastos de envío.
Compromiso social
No es la primera vez que Bodegas Arzuaga forma parte de una acción altruista. De hecho, también relacionado con el mundo del deporte, la empresa fue una de las patrocinadoras de ‘Desafío Solidario’ el pasado enero. Se trató de un partido de fútbol que enfrentó a deportistas contra periodistas y figuras del mundo de la televisión en Valladolid. La iniciativa la impulsó la Fundación Eusebio Sacristán de Valladolid con el objetivo de recaudar productos de primera necesidad para el Banco de Alimentos.