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A bordo de la foodtruck de Cata la lata y a lo largo del Camino francés, se han degustado en 7 etapas los mejores aperitivos elaborados con conservas de pescado y marisco
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La credencial del catador, además de acumular sellos tras haber probado las diferentes tapas, ha servido de hoja de ruta para los peregrinos
Acompañando al popular eslogan “Una lata en cada etapa” nace, una vez más, la magia entre Cata la lata y el Camino de Santiago. Tras los éxitos acumulados en anteriores acciones diseñadas por Canal Uno para la promoción de las conservas de pescado y marisco gallegas, llega La Compostelata. Una campaña organizada por ANFACO-CECOPESCA, promovido por la Xunta de Galicia y diseñada por la agencia de Román Pereiro.
La Compostelata es un viaje a bordo de la foodtruck de Cata la lata. A lo largo del Camino de Santiago francés, se han degustado en 7 etapas los mejores aperitivos elaborados con conservas de pescado y marisco. «De igual manera que sellas la famosa Compostela durante el camino, tendrás que hacerlo con La Compostelata. Acreditarás haber probado al menos 4 de nuestras tapas para entrar en un sorteo de lo más especial», declaran desde la agencia.
Con un diseño colorido, La Compostelata evoca a la propia ruta del camino en la que se contrasta costa e interior, tierra y mar. Los titulares, ensartados dentro de formas geométricas, nos recuerdan a letreros y flechas que nos guían en el camino hasta Santiago de Compostela. Respetando la tradición que acompaña a la Compostela, se ha seguido una línea estética basada en los sellos con la intención de que esta experiencia quede estampada en cada uno de los peregrinos que les acompañen durante la acción.
Basado en la tradicional Compostela, se ha creado un propio pasaporte o credencial del catador. La Compostelata es un documento que, además de acumular sellos tras haber probado las diferentes tapas, ha servido de hoja de ruta para los peregrinos. El formato de acordeón, su tamaño manejable y el factor de la personalización son aspectos que se ajustan al viajero y a su deseo de hacer de la experiencia algo imborrable, algo propio.
La idea de digitalizar La Compostelata se ha ejecutado con la incorporación de un código QR por cada etapa. Gracias a esto los peregrinos han podido acceder a una web con información acerca de las conservas utilizadas de cada etapa, la receta elaborada y sobre la ciudad. Todo ello disponible en 3 idiomas: castellano, gallego e inglés.
