En Galicia existen cinco denominaciones de origen del vino, pero en Extradixital queremos destacar una que especialmente ha sabido trabajar la marca y su valor. A día de hoy D.O. Rías Baixas es mucho más que un sello de calidad. Es carácter atlántico, un estilo de vida concreto y presume de una forma autóctona de hacer las cosas que triunfa dentro y fuera de nuestras fronteras. Llevan desde 1988 -año en el que se creó oficialmente- vendiendo muchas más cosas que un producto. Han conseguido meterse en ese mundo “agrochic” por el que suspiran países como Japón, Irlanda u Holanda y, en ello, está implicada su directora de marketing Eva Mínguez.
¿A qué sabe el marketing que hacéis desde la D.O. Rías Baixas?
Al trabajo de todo un sector: viticultores, bodegas y Consejo Regulador. Todos ellos han tenido muy claro, desde su nacimiento, la apuesta por la calidad como factor diferencial. Han trabajado a lo largo de todos estos años teniendo esta premisa muy presente.
Apostamos por la calidad como factor diferencial
¿Cómo conseguís desde vuestra denominación de origen y desde el propio Consejo Regulador, transformar la venta de volumen en venta de valor? ¿Cuáles son las herramientas para lograrlo?
Nosotros somos una denominación de origen pequeña, pero con un producto único, unas variedades de uva autóctonas que en su zona de producción alcanzan su máxima expresión, y con unos estándares de calidad muy ambiciosos. A partir de aquí, teniendo esto muy claro, somos conscientes de que hay que comunicarlo y trasmitirlo. Este mensaje debe llegar al consumidor final, de forma que pueda apreciar la diferencia entre los Rías Baixas y toda la oferta existente en el mercado, y así, que esté dispuesto a pagar un plus por nuestros vinos.
Las herramientas son muchas, pero si tuviese que destacar una sería la formación en su más amplio sentido. Tantos nuestros prescriptores como el consumidor final, deben conocer las características de nuestro producto, nuestra zona de producción, el minifundio, el trabajo a mano en la viña, los controles depósito a depósito… Y una gran variedad de características que nos definen y nos hacen diferentes.
Las herramientas para aportar valor son muchas, pero destacaría la formación en su amplio sentido
Siempre desarrolláis ambiciosas campañas publicitarias y de medios para promocionaros dentro y fuera de nuestras fronteras. Al igual que en vuestros vinos, ¿apostáis por el talento autóctono? ¿Con qué agencias soléis trabajar? ¿Nos sorprenderéis pronto con una nueva campaña?
En Galicia tenemos la gran suerte de contar con magníficas empresas que se dedican al mundo de marketing y siempre tratamos de trabajar con el mejor talento posible.
Trabajamos con diferentes agencias según los objetivos, alcance y lugar en el que se desarrolle la campaña, nunca lo hacemos en exclusividad con una sola.
En cuanto al ámbito nacional, saldremos en breve con una campaña en medios on y off line con el slogan “Gusta Allí, Gusta Aquí”. Se trata de una campaña continuista, iniciada el año pasado.
En el ámbito internacional estamos llevando a cabo nueve planes de promoción en diferentes países y, en este caso, la casuística varía mucho de un mercado a otro según posicionamiento, penetración de la marca, presencia de bodegas y marcas…
En el ámbito internacional estamos llevando a cabo nueve planes de promoción en diferentes países
Vuestro sello de calidad posee un marcado carácter atlántico, continuamente lo maridáis con otros productos gallegos sin perder de vista el enoturismo o la Ruta del Vino Rías Baixas, ¿son las experiencias sensoriales el mejor aliado para vosotros?
El vino es algo vivo y, en nuestro caso, muy vinculado a su lugar de origen, a su zona de producción. Para nosotros esto es una gran ventaja ya que el entorno no puede ser mejor. Las Rías Baixas aportan una riqueza paisajística, cultural y gastronómica difícil de encontrar en cualquier otro lugar. La Ruta del Vino Rías Baixas ha desarrollado en los últimos años una gran labor, aportando multitud de experiencias que enriquecen la zona y generan un valor diferencial.
El vino es algo vivo y, en nuestro caso, muy vinculado a su lugar de origen
El año 2020 fue complicado para todos a causa de la pandemia, pero además del cierre de la hostelería vosotros también tuvisteis que hacer frente a los aranceles de Donald Trump y al Brexit. A pesar de todo seguís creciendo, especialmente, en exportaciones. ¿Cómo lo hacéis? ¿Qué papel ha tenido el marketing en este sentido?
Efectivamente el año 2020 fue un año complicado, pero lo que siempre tuvimos claro es que no podíamos quedarnos parados. Aunque con muchas limitaciones, seguimos adelante con nuestra labor promocional y, en la medida de lo posible, se llevaron a cabo muchas dinámicas y actividades.
El crecimiento en las exportaciones durante el ejercicio pasado es el resultado de muchos años de trabajo en los que, sin descuidar nuestro mercado natural, hemos apostado siempre por la internacionalización tratando de hacernos un hueco más allá de nuestras fronteras. Una parte importante del presupuesto de marketing se destina a los mercados internacionales. Se desarrollan planes de promoción en nueve países, así como otras diferentes acciones de penetración en mercados en los que apenas tenemos presencia, pero en los que consideramos que tenemos potencial o que es importante estar con una vocación y enfoque a medio plazo.
Apostamos por la internacionalización para hacernos un hueco más allá de nuestras fronteras
¿Qué retos tiene por delante tu departamento en este 2021?
Que la marca Rías Baixas siga desarrollándose y creciendo como sinónimo de vinos de calidad, aportando valor a todo el sector, viticultores y bodegas, en un momento especialmente crítico como el que estamos viviendo.