El periodista y escritor Juan Cruz, en su paso por los cursos de Verano de la UNIA, no ilustra sobre un referente ético del periodismo: Chaves Nogales.

Juan Cruz: «Periodismo y literatura se deben llevar bien en la sintaxis pero mal en la inventiva»

Es el periodista más veterano en Miguel Yuste. Juan Cruz acaba de cumplir sesenta años en la profesión pero sigue defendiendo los valores del periodismo como el primer día, «¿Opinar equivale a informar? Eso es aberrante». Ha participado en uno de los cursos de verano de la UNIA sobre Chaves Nogales, «un hombre que quiso para su país lo mejor, y cuando opinó tuvo y tomó opciones como cualquier ciudadano pero como periodista contaba lo que veía y ocurría». También hablamos de «Hechos de una vida. Ciudadano Polanco» y el caso Sogecable. El autor lamenta que la mentira ahora forme parte del periodismo.

La actualiad obliga. Hace unos minutos que has llegado de las Islas. ¿Qué sensación te deja ese atlas de geología incandescente, humana?

Una enorme tristeza y contradicción. Es un espectáculo fascinante que destroza haciendas, casas, porvenires y anula el pasado de mucha gente que tiene ahora que tiene ahora que reconstruirse. De todos modos, es admirable la paciencia con la que los palmeros están afrontando este drama. Lo cual me indica que en efecto la paciencia y la bonhomía es parte de su manera de ser. 

Otro revés que le hizo viajar a nuestra tierra en los últimos tiempos es el encuentro, últimos adiós, a Caballero Bonald… 

La vida va haciéndose. Era un gran amigo, un hermano muy mayor, también de sabiduría. 

Con él también se va uno de los últimos pilares de la intelectualidad …

Si porque era un hombre que tenía ante las cosas que ocurrían una mirada de frente y lúcida. Nunca lo vi decir una banalidad, en todo caso una bonalidad. 

Se habla poco de esta otras crisis, la de los intelectuales

Es histórico. Quizás no lo dijo Sócrate, Shakespeare … Unamuno sí. ¿Cuándo no ha estado en crisis el pensamiento?, casi siempre en crisis total. Es lo que nos lleva de la mano al error o al acierto, o a la inepcia. 

Ahora llega a Sevilla para participar en un curso de verano de la UNIA sobre Chaves Nogales. ¿Qué supone para usted su legado?

Un gran periodista. Lamento que solo se hable de él ahora por lo que opinó. La opinión no es privativa del periodista. Ni es del periodista. Chaves Nogales hizo entrevistas extraordinarias, en las que fundamentalmente recogía lo que decía el entrevistado. Hubo crónicas impresionantes previas, durante y después de la guerra. También un modo de interpretar, de opinar sobre lo que estaba ocurriendo. La gente olvida su tarea de periodista, de persona que se enfrenta a los hechos, los rescata y lo cuenta. Ha venido mejor para esta época referirse al Chaves Nogales opinador porque estamos en una estamos en un momento de opinadores y no periodistas. El Chaves Nogales que cuenta los hechos de alguna manera parece molestar a los periodistas que quisieran que el periodismo fuera de opinión. 

Algunos políticos se apropian de él como “ejemplo de equidistancia”  ….

Si leen las crónicas que hizo sobre Franco y lo éste hizo en la guerra, la apropiación indebida que hizo de términos como libertad, esa palabra que la gente la utiliza hoy como si fuera un hallazgo contemporáneo, tendrían que avergonzarse de compararse o de apropiarse de Chaves Nogales. 

Es un referente ético. Los periodistas en ejercicio y los del por venir, ¿Qué van a encontrar cuando se miren a su espejo?

El modo de informar, el oficio de referirse a los hechos, de preguntarle a la gente, de ser periodista. No comprendo cómo nos hemos dejado arrebatar los periodistas este activo periodístico como es Chaves Nogales, un auténtico tesoro periodístico que no opinador o ideológico. Aunque lo hayan convertido en un ideólogo no lo era, solo porque a algunos les ha guste que no le gustara los rojos. Pero eso no es la esencia de Chaves Nogales. Era un hombre que quiso para su país lo mejor, y cuando opinó tuvo y tomó opciones como cualquier ciudadano pero como periodista contaba lo que veía y ocurría.

¿Qué estaría haciendo ahora en estas sociedad tan compleja?

Chaves Nogales estaría tratando de saber más para contarlo. Recorrió pueblos, ciudades, caminos … para hablar con todo el mundo. Con un respeto imponente, excepto con Goebbels. Con este personaje hizo una excelente pieza periodística, porque las preguntas salieron sin ningún comentario. Puso un perfil previo, civil, contó como era ese hombre que en ese momento no era el hombre que fue después pero previó como podría ser. Y en caso de Franco, también lo previó. 

No sólo era periodista sino también escritor …

Era un gran narrador. Trabajos como “Belmonte”, “La espera de Francia” son de escritor, de testigo, de testimonio. El periodista Chaves Nogales está en otros sectores de su obra. “La espera de Francia” es el exabrupto de un ciudadano. El periodista tiene unas reglas que el cumplió siempre pero cuando estaba escribiendo un libro de testimonios no lo hacía como periodista. Entonces si lo llamamos periodista siempre estaremos ofendiendo a Chaves Nogales. Hay que llamarlo escritor y periodista. En pocos casos de la historia de la escritura es tan justo como en este caso diferenciar ambas cosas. 

La literatura no era la hermana pequeña de Chaves Nogales …

No, era un escritor formidable, extraordinario. Con una enorme gracia y con una capacidad de relacionar unas cosas con otras que resulta emocionante. Una lección para los periodistas y escritores. Sobre todo, lo que me sorprende es esa actitud admirativa hacia Chaves Nogales no incluya la justicia de consdierar que era un periodista y un escritor, y no “y también” un escritor. Cuidaba el lenguaje y cuidaba los hechos. 

La relación periodismo y literatura, ¿Qué tal se llevan?

Se deben llevar bien en la sintaxis pero mal en la inventiva. El escritor puede inventar lo que quiera, el periodista no debe inventar estrictamente nada. Y mucho menos adjetivos. 

No es inventiva el final de Chaves Nogales, una tumba sin nombre, o Luis Cernuda, desahuciado en México … ¿Hay poca memoria histórica con nuestras letras?

Todas esas cosas son metáforas de la miseria de la guerra. Sobretodo para los vencidos, que todavía lo siguen siendo. Cuando se reclama desde la política que la gente olvide lo que pasó, en realidad lo que se está diciendo es que se olvide de los sufrimientos que padecieron los que peores lo pasaron. No fue una guerra de buenos y malos, sino de la ley con aquellos que no le gustaba la Ley. Se saltaron todas las leyes con todos los apoyos internacionales que pudieron, algunos de los cuáles luego fue protagonista de una de las grandes masacres del siglo XX. Cómo que no se va a recordar esa maldad, y lamentablemente esas personas, a las que también incluyo Antonio Machado, son testimonios y metáfora, víctima, de aquella ruindad. 

También marcó una guerra a Jesús de Polanco, cuyos hechos de vida que retratas en “Ciudadano Polanco” comienza acordándose de las mujeres de los años 40 que perdieron y lo perdieron todos. Hablando del editor, ¿En qué estaría ahora?

Polanco quería era retirarse en Tenerife, en el hotel que estaba construyendo poco antes de su muerte. Que terminó pero no pudo disfrutar. Era un hombre que leía los periódicos con avidez y profesionalidad, se sabía el libro de estilo de El País. Al periodismo de hoy le hubiese sensatez y datos. 

Reconocería El País que se hace hoy …

El País tiene muchas cosas que él reconocería y otras que provienen del momento actual le resultaría raras. Consideró desde el principios que si el periódico se ponía en abierto no iba a ganar dinero. Se puso en cerrado para luego abrirse … creo que ha estado demasiado tiempo demasiado abierto. 

Dedicado buena parte del libro al caso Sogecable intentado con rigor y veracidad dejar testimonio de un episodio muy grave que afectó sobremanera a Polanco y en cierta media a la libertad de expresión …

Hoy muy poca gente tiene memoria de eso, que no fue en el siglo pasado. La persecución de Polanco del gobierno de Aznar con la ayuda de un juez y periodistas … fue a un grupo de comunciación que resultaba poco grato a los que entonces tenía el poder en España y no quería perder. La manipulación de un periódico o de un grupo de poder siempre indica que la vida como dictadura sigue vigente en nuestro país.  

Comparte esta noticia en redes sociales:
Quizá te interese:
Ofertas de Empleo

Ofertas de Empleo

Actualización diaria de ofertas de empleo, becas, concursos, premios.

En Portada

Síguenos en Twitter

bloque-newsletter

Suscríbete a nuestra Newsletter

Recibe en tu correo electrónico las noticias destacadas de Andalucía

Quiénes Somos