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La emisora de Prisa es, según los últimos datos del EGM, la única que registra cifras en positivo con respecto al mismo periodo de 2017.
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El gran batacazo se lo lleva RNE que ha dejado escapar entorno a 10.000 seguidores, dato que contrasta con los más de 30.000 nuevos oyentes a los que La Ser ha dado la bienvenida.
Hace tan solo unos días conocíamos los datos de la tercera oleada del Estudio General de Medios (EGM) donde, como siempre, podemos comprobar en qué estado se encuentran los principales medios de comunicación, entre ellos, la radio.
En este caso, sólo una de las cinco emisoras más escuchadas en Castilla y León tiene motivos para celebrar. Y es que, la Cadena Ser es la única que ha ganado audiencia, tanto que la subida que ha registrado -de más de 30.000 oyentes– ha supuesto un crecimiento del 10% con respecto al mismo periodo del año anterior. Esto, además, la sigue situando a la cabeza de la lista.
Para el resto la situación no pinta tan bien. Pérdidas generalizadas para todas las emisoras, entre ellas la Cadena Cope, segunda más elegida por los oyentes en Castilla y León, que pierde más de 3.000 oyentes, es decir, un 1,5% menos. Onda Cero, que sigue en tercera posición, pierde más aún que la Cope, cerca de un 3,5% menos, que se traduce en 5.000 personas que cambian sus preferencias.
El gran batacazo se lo lleva RNE que, si en el mismo periodo de 2017 contaba con más de 124.000 oyentes, este año se ha dejado a casi 10.000 por el camino, entorno al -8%.
Cierra la lista esRadio que sigue con datos muy modestos en la comunidad donde, además, ha registrado datos negativos en este EGM. De los 51.100 oyentes con los que contaba, se queda con 49.500, algo más del 3% de audiencia.
