Crece casi tanto como se frena el mercado publicitario. Puede parecer una paradoja pero los datos ofrecidos en las últimas semanas por las consultorías estratégicas y operativas de comunicación siguen indicando claramente que estamos ante un sector claramente en alza en España. Las cifras de negocio de las principales compañías del sector confirman que los clientes se apoyan en ellas más que nunca. LLYC, Atrevia y Tinkle han presentado sólidos incrementos de facturación y son, con diferencia, las líderes de la industria en nuestro país.
LLYC, presente en 12 países con un total de 20 oficinas, con unos beneficios declarados de siete millones de euros sobre casi 90 de facturación, lidera un ranking en el que hay ya 17 compañías que superan los cinco millones de facturación cada una en ese concepto. Por detrás, Atrevia y Tinkle. Con ingresos declarados respectivamente de 36,1 y 32,3 millones de euros, completan unas posiciones de privilegio y que marcan una clara tendencia alcista.
Para hacernos idea de la magnitud del negocio y de lo que se mueve alrededor de él, entre las tres consultoras líderes, suman casi 1.800 empleados. La mayoría pertenecen a LLYC, que supera los 1.100 en todos sus mercados; mientras que Atrevia posee 550 y Tinkle, 202.
El club de los más de 10 millones de facturación
Por encima de los diez millones de facturación aparecen nombres tan reconocibles en el sector como Newlink, Kreab, Roman, MARCO, OmnicomPRGroup, APPLE TREE o Prodigioso Volcán, Todas estas firmas destacan entre las más destacadas por facturación y por crecimiento en línea de negocio.
Conviene no olvidar que desde estas consultoras se ofrecen a las compañías que las contratan apoyo externo ofreciendo asesoría, visión de negocio y estrategia enfocada a la comunicación. Todo se realiza desde el exterior de la propia empresa. Este proceder aporta dosis de independencia, conocimiento y visión más periférica. Aportan, sin duda, talento desde fuera hacia dentro. Claramente, las corporaciones no recortan gastos en esta partida, a la que otorgan gran valor y por ello ganan peso dentro de los órganos donde se toman las decisiones empresariales. Algo que parecía una meta inalcanzable hace unos años empieza a ser realidad y esos asesoramientos externos en materia de comunicación ya son percibidos como necesarios. Bendito sea.