- “El futuro del marketing se basa en la segmentación, los resultados y la conexión emocional con el público.”
- “No he inventado nada, solo he cohesionado estrategias y las he orientado para ofrecer ventajas competitivas a partidos políticos, que les permita hacer llegar el mensaje a la ciudadanía.”
Krldus Marketing Político es un proyecto fundado en Castelldefels que cuenta con apenas un año de vida y que ofrece a los profesionales de la política presentar su programa electoral de forma moderna, transformando elementos de sus programas en animaciones 3D.
Nos hemos reunido con Marc Cardelús, creador y socio del proyecto, para analizar los pormenores de tan original propuesta y charlar acerca marketing, política, inteligencia artificial y nuevas tecnologías.
¿Cómo nace la idea de ofertar 3D y nuevas tecnologías específicamente a políticos?
El mundo 3D existe desde hace unos 15 años, funciona principalmente en el sector inmobiliario, pero existe una saturación de empresas, por lo que es muy difícil destacar. La diferenciación es un elemento clave del éxito empresarial. Así pues, identifiqué un problema en la política que nadie estaba abordando. Ese problema era que los partidos políticos no lograban explicar sus propuestas arquitectónicas, y pensé en crear videos 3D filmando con dron la ciudad y recreando los edificios que ellos proponían.
No he inventado nada, solo he cohesionado estrategias y las he orientado para ofrecer ventajas competitivas a partidos políticos, que les permita hacer llegar el mensaje a la ciudadanía. Este método permite articular campañas objetivas que aumenten la credibilidad del político. De forma paralela, hemos desarrollado otro tipo de servicios centrados en el marketing político, pero siempre con un carácter innovador.
La creatividad es un valor inherente a nuestra empresa y creemos que es la mejor herramienta para seguir creciendo.
¿Cómo ves el futuro del marketing? ¿Crees que pasa por ofrecer soluciones muy específicas, casi de nicho, como propone Krldus?
El futuro del marketing pasa por varias vertientes. Las empresas cada vez van a estar más especializadas en un servicio, eso va a implicar que los clientes tienen que conocer bien qué necesitan para responder a sus necesidades. Además, los mensajes que lancen tienen que tener un público muy concreto, al que quieran vender su producto. El buen marketing habla de soluciones, no de procesos; por ello, la clave no es explicar el artículo, sino destacar las consecuencias de comprarlo.
El último factor considero que es la emoción. Este aspecto genera recuerdo en el receptor, que de alguna forma se ve identificado. En resumen, el futuro del marketing se basa en la segmentación, los resultados y la conexión emocional con el público.

¿Cuáles son los principales clientes habéis tenido hasta la fecha? ¿Qué soluciones habéis creado para ellos?
Hemos trabajado para los principales partidos políticos en más de 60 ciudades, principalmente con el PP y el PSOE. El 70% de ellos han mejorado sus resultados. Somos profesionales objetivos cuyo único fin es lograr atraer el voto de los ciudadanos. Nos pagan para que la gente les vote, no para que les votemos nosotros. Esta profesionalización de la política es poco común en España, pero creemos firmemente en ella.
Hemos creado soluciones de todo tipo. Es verdad que los vídeos 3D han sido nuestro principal servicio, sin embargo, hemos desarrollado también spots electorales, páginas web, producción de contenido para redes… De nada sirve todo esto si no hay una estrategia detrás. Nosotros configuramos los objetivos de la campaña y creamos las propuestas que impulsen al candidato.
En vuestra web tenéis artículos sobre Chat GPT. ¿Qué potencial y qué aplicaciones políticas le veis a las herramientas de IA aplicadas al marketing? ¿Y a la política?
Es una buena pregunta. La IA puede ayudar en muchos aspectos. Los más básicos serían la redacción o mejora de discursos o argumentarios políticos, por ejemplo. Existen empresas que están desarrollando herramientas de neuromarketing político, capaces de analizar la reacción humana ante un elemento visual. Esto permite saber donde se va a ir la atención del receptor al ver un cartel, y esto es interesante para estructurar el mensaje. Si sabemos predecir como nos vamos a comportar, el mensaje se orienta en ese sentido.
Por otro lado, están naciendo algoritmos capaces de saber las necesidades o evolución del voto por territorios, incluso en función de las calles. El análisis de datos es relevante de cara a hacer un buen diagnóstico. Si no conoces que le pasa a tu paciente, no puedes darle la medicina correspondiente. En política es lo mismo. La IA va a ayudar aportar nuevos datos a los consultores, de ellos dependerá su buen uso para construir campañas exitosas.
¿Qué diferencias habría entre hacer marketing para políticos y para empresas? ¿Podríamos decir que la política es una forma de marketing?
Las empresas suelen vender productos o servicios y quieren que sus clientes paguen por ello. En la política, no se busca un pago económico sino un voto. Realmente no hay grandes diferencias, se trata de un proceso de venta, donde las emociones cada vez ganan más protagonismo. Desde mi punto de vista, el marketing político tiene mucho margen de mejora.
Es necesario que los políticos confíen en profesionales y no en amigos. Últimamente, las campañas se vinculan a la mentira, al insulto y al humo. Los políticos que hablen de propuestas en positivo y no entren a combatir constantemente suelen ser los mejores gestores. Si no tienes proyecto, solo puedes hablar del adversario, y eso a largo plazo es negativo.

Tu empresa fue noticia a finales de agosto gracias al premio Napolitan Victory Award 2023, un galardón que en otras ediciones han cosechado Dick Morris, asesor de Bill Clinton, o Aleix Sanmartín, que participó en la campaña de Pedro Sánchez. ¿Qué ha supuesto para vosotros este premio?
Este premio ha supuesto nuestro primer reconocimiento internacional, del cual estamos muy orgullosos. Hace tan solo doce meses que iniciamos este concepto, y ha sido una sorpresa obtener este galardón por parte de la academia de ciencias políticas. Considero que nos ha dado un gran impulso y nos sitúa como una empresa líder en este sector. Uno de nuestros retos es la expansión a otros países de América, y este premio nos abre muchas puertas que nos ayudaran a seguir avanzando en esta línea.