La escalada de precios en la cadena alimentaria encuentra una convincente explicación si lo analizas desde fenómenos externos como la Guerra de Ucrania, la crisis climática o los coletazos del COVID. La cuestión se complica si nos afanamos en comprender desde un planteamiento simple cómo se conforma el PVP desde el origen hasta el lineal de ventas. Y no, no basta con una simple resta entre lo que se le paga al productor y lo que abonamos en caja.
Hay otros factores que también contribuyen al precio final: mano de obra, materiales, pesaje, transporte en todas las fases, costes energéticos, establecimientos, embalajes, envases y adecuada gestión de residuos, mermas por deterioro o desperfectos, gestión comercial, seguros, impuestos, etc. Aún así aunque la cadena es larga, el último eslabón es quien compromete su imagen y pone «la cara» ante el consumidor final. De esta manera, se pone de manifiesto una disonancia entre el estado de opinión generalizado y el esfuerzo de los supermercados por evitar que los consumidores quienes asuman íntegramente la escalada de precios.
Ante tal coyuntura, hay empresas que han convertido el problema en oportunidad. Es el caso de la cadena de supermercados Mercadona, que ha tirado de innovación y ha generado una APP llamada internamente «DPP», una herramienta en forma de aplicación que mapea los costes en cada proceso para optimizarlos de forma científica. Es decir, aumenta el margen de rentabilidad de los productos. Una obligación como empresa pero con un propósito básico para Mercadona: no perder competitividad y que al ‘jefe’ (cliente) le cueste menos. Que sea rentable para ambos, win-win.
Ahorro de 150 millones de euros
Gracias a esta app, sencilla e intuitiva, los directivos de la compañía pueden conocer de forma científica los costes de cada proceso, fundamentalmente comerciales y logísticos, como paso previo para poder optimizarlos. En un mapa puedes fijar una instantánea con la trazabilidad de un producto; desde el proveedor al bloque logístico, su precio de compra, los impuestos que devenga y los costes de transporte. Además, se puede hacer simulaciones en cualquiera de estos aspectos para conocer de forma inmediata si el cambio planeado hace más eficiente el servicio o la venta.
Y los resultados cantan por sí solos. Así, debido a la subida del gas y el petróleo por una misma mercancía de 2021 se ha pagado 50 millones más en 2022. Los precios de productos como los cereales y el aceite de girasol se han incrementado en torno al 90%. Pues bien, gracias a esta herramienta de optimización y contención de costes se ha conseguido revertir esta pérdida en más de 150M€.
Transportar más con menos, menos costes y más calidad
Con la ayuda de esta ‘DPP’, a través de la visualización del mapa de proveedores y bloques logísticos, se han alcanzado hitos de optimización que se han visto traducidos en un importante ahorro. Vamos a poner algunos ejemplos para entender mejor esta nueva filosofía que tiene como objetivo avanzar en los procesos de mejora para obtener la máxima rentabilidad en las tiendas.
Una buena práctica de todo este nuevo análisis en logística lo protagoniza la zanahoria rallada o la rúcula. El simple cambio de aumentar las unidades por caja ha permitido transportar más cantidad de producto en el mismo espacio de antes. En total un ahorro de 400.000 €.
Otra acción de referencia la encontramos en la pizza congelada de masa fina, donde el aumento de las unidades por caja a la hora de transportarlas, además de mejorar la rentabilidad en 100.000 €, ha mejorado su calidad, ya que el producto se mueve menos en la caja. También se puede destacar la parada técnica de 30 minutos menos al día en el mantenimiento de la máquina del zumo de naranja. Este ‘descanso’ ha supuesto un ahorro de cinco millones de euros.
Esta aplicación también permite medir el despilfarro, es decir, lo que no se vende en tienda. Con iniciativas implantadas tan simples como adaptar el formato de venta de 12 a 6 unidades. Un pequeño esfuerzo que deriva en una gran reducción de costes, 40.000 euros.
En definitiva, este modelo de éxito demuestra que con la innovación y la tecnología adecuada se puede ser más eficiente, mantener precios y tener menos costes.