El Estado de Alarma toca a su fin el día 9 de mayo, y ante esto Andalucía ya ha planificado el «día después». El gobierno andaluz asumirá con plena autonomía, aunque «cogobernando», la desescalada en la sinuosa senda de tomar medidas sin que afecte a derechos fundamentales.
Así, determinar acciones como el toque de queda o aquellas que restrinjan a la movilidad quedarán pendiente, en su caso, de las tribunales de justicia. Sin embargo, en lo que sí puede actuar de forma autónomo es en la limitación de horarios que afecta a la actividad comercial así determinar el aforo en los locales de hostelería y tiendas.
De esta manera, el presidente ha anunciando las siguientes medidas en la fase de inicio (hasta el 31 de mayo):
- Desparece el toque de queda, la comunidad pasa a estar abierta.
- Apertura de la hostelería hasta las 00:00. Máximo de 8 personas en el interior y 10 en el exterior, dependiendo del nivel de alerta.
- Celebraciones hasta 300 personas en el interior y 500 en el exterior, según el nivel de alerta.
- Bares con música y discotecas podrán abrir hasta las 02:00 de la madrugada con la misma condiciones de aforo y mesa que los restaurantes. Será obligatorio la mascarilla.
- Espectáculos (toros, cines, teatros y eventos deportivos): en los niveles de alerta 1 y 2, habrá que dejar una butaca libre entre grupo de espectadores. En el resto de niveles se tendrá que dejar el metro y medio de separación entre espectadores.
- En playa y piscina no habrá limitación de horarios.
Se prevé el establecimiento de tres fases en función del nivel de vacunación: fase de estabilización (9 de mayo hasta el 31 de mayor); una segunda, de avance (a partir del 1 de junio) y una tercera, de normalización, que entrará en vigor el 21 de junio. Para esta fecha si se cumplen las previsiones en el envío de vacunas se espera que el 70 % de la población tenga al menos una dosis, y que un 40 % esté inmunizada. Se iniciaría de esta manera la normalidad en Andalucía, según las palabras de Moreno Bonilla.