La fina línea entre perderse y encontrarse. Sentir que eres extranjera de tu propio cuerpo, que ni las alegrías ni las penas te mueven. Hacer de tu viaje un camino de flores y, como la propia autora lo describe, “entender que la tristeza se hace poema”. Publicado por la editorial Valparaíso, ‘Seis flores de enero’ es un poemario escrito por Lucía Melz, una joven poeta que con tan solo 19 años ya ha ganado diferentes recitales de poesía y ha publicado una pequeña colección de poemas titulada ‘Allí donde nace la tristeza’.
Dentro de este libro, encontramos los distintos poemas divididos, como dice el título, en seis flores. En cada una de estas partes, se agrupan poemas en los que la autora ha querido expresar un sentimiento, aunque este no se mencione. De ese modo, la persona que lo lee tiene la libertad de sentir sin ningún tipo de límite y le puede poner nombre a esa emoción.
En una conversación con la escritora, tuve el placer de que compartiera sus sentimientos e ideas de ‘Seis flores de enero’ conmigo: “Confío en que el lector se vea de alguna manera reflejado en el texto. Al final, la literatura y, sobre todo, la poesía, es muy subjetiva. Puedo leer un poema un día y que me transmita una sensación y al leerlo unos días más tarde me evoque emociones distintas”, ha declarado Lucía Melz. “Espero que al lector se le remueva algo por dentro al leerme”.
Poemas que cuentan historias
A lo largo de sus 84 páginas, los poemas van contando una historia. En ellos, se ve un recorrido en el que una se descubre a sí misma, resurge de sus cenizas, de aquella tristeza que le impedía avanzar. Un viaje intermitente a una misma, el que al final te lleva a encontrarte: “Me gustaría que, tras leer mi libro, el lector conectase con él mismo y se sintiese más cerquita suyo. Al final, la poesía es intimidad y el lector puede verse reflejado en la vulnerabilidad del poema”.

La experiencia de leer el libro ha sido como si subiera una escalera llena de flores. Una escalera ascendente, en la que había momentos que parecía que el dolor me empujaba a caer, pero acababa levantándome. Una escalera en la que encontraba pétalos perdidos y flores aún por recoger. Este poemario fue un viaje lleno de emociones que me hicieron cuestionarme aquello que jamás había sentido. Acabé leyendo una historia que sentía mía, y eso fue precioso.
Lucía Melz ha escrito numerosos poemas, pero nunca había publicado en solitario un libro con una editorial de tanto renombre. “Cuando me llegaron los primeros ejemplares ‘Seis flores de enero’ no me lo creía. Abrí la caja con los libros, me quedé mirándolos y dije: ¿y ahora qué?”, ha expresado. “Ver por primera vez mi libro fue una sensación super bonita. Ver que lo que tú has sentido, llorado y escrito está ahí, materializado en papel, y el saber que otras personas lo van a leer y quizás verse reflejadas en lo que tú has vivido es simplemente increíble”.
La poesía es un canto a la libertad de los sentimientos. La poesía es complicidad con el autor, pero, sobre todo, con uno mismo. Es saber que con cada palabra que lees te acerca más a descubrir cómo eres, lo que sientes, qué canción te mueve el corazón. Este poemario acaba siendo tu propia historia, las lágrimas que nunca derramaste. “He llamado literatura a lo que no supe llorar”, ha escrito la autora.
Autora: Alba Conte
Editora: Alexia Pavón
Este artículo forma parte de los contenidos de Entremedios, plataforma impulsada por los alumnos del Grado en Periodismo de la Universidad de Zaragoza