La transformación digital de la Corporación Aragonesa de Radio y Televisión, la mejora de las condiciones laborales de todos los profesionales que trabajan en y para la Corporación y una apuesta importante por el sector audiovisual de la comunidad y por la mejora de la producción propia son algunas de las prioridades que se ha marcado Teresa Azcona, directora general de la CARTV desde hace seis meses.
- Después de medio año al frente de la CARTV, ¿qué balance hace?
- Han sido seis meses muy intensos. Cuando asumí el cargo me puse como prioridad varios temas que eran de urgencia y también importantes a medio y largo plazo. Por un lado, había que cerrar el contrato-programa para 2018, 2019 y 2020 y con él, el marco de estabilidad de trabajo para estos tres años, ya que en él se delimitan los recursos que vienen del Gobierno de Aragón. Estaba bastante avanzado, pero hubo que darle un empujón final. Otro punto prioritario era la negociación del convenio colectivo para la CARTV. Cuando entré, llevaban 20 meses negociando y, actualmente, seguimos en ello. En septiembre, estuvimos bastante cerca de alcanzar un acuerdo, pero había discrepancias en algunos puntos y nos dimos un Ahora estamos volviendo a retomar la negociación para cerrarlo cuanto antes. Y, por supuesto, no me puedo olvidar de la transformación digital, un tema necesario e imprescindible para cualquier medio de comunicación. Porque, aunque Aragón TV y Aragón Radio hayan sido siempre pioneras y hayan estado por delante en innovación tecnológica, los recortes presupuestarios y las limitaciones de los últimos años, han hecho que en algunos aspectos no estemos tan adelante.
- Como comenta, es imposible dar la espalda al reto digital. ¿Cómo están trabajando en la CARTV este tema?
- Aragón Radio y Aragón TV son digitales desde hace tiempo. Desde sus webs se puede acceder a programación a la carta y cuentan con una presencia creciente en redes sociales, en las que cada vez tienen más seguidores. Pero faltaban, por un lado, las inversiones –que se están haciendo gracias al contrato-programa- y también una transformación de la organización, un cambio en la forma de trabajar. Y eso es lo que estamos abordando ahora. De momento, hemos lanzado un piloto para el área de deportes, Aragón Deporte, que ya está funcionando en pruebas y que va a dar cabida a contenidos deportivos que, de otra manera, no tendrían espacio. También hay otro piloto, que está ahí, avanzando poquito a poco, sobre cultura, Aragón Cultura. Y es que en vez de abordar la transformación digital de forma global, hemos empezado por estas dos áreas. Por supuesto, es un punto que no está terminado, porque es un proceso continuo en el que hay que seguir trabajando, pero sí que está arrancado y estoy muy contenta de lo conseguido hasta ahora.
- Antes del verano se firmaba el contrato-programa, con un valor total de 146 millones euros para este año y dos más, con una aportación de 47, 49 y 50 millones de euros, respectivamente, para cada anualidad, lo que supone un incremento respecto al anterior documento. ¿Cómo se van a distribuir?
- Hay una parte muy clara que es la destinada a las inversiones y que va ligada también al reto digital. Por ejemplo, se van a transformar los platós de informativos para llevarlos a otro nivel de innovación. Tenemos unos informativos que, como medio público, son el corazón de lo que hacemos y, además, son líderes en la comunidad (no lo digo yo, lo dicen las cifras) y muy apreciados. Sin embargo, están en un espacio que, prácticamente, no ha cambiado desde los inicios de Aragón TV. Por otro lado, venimos de una etapa de crisis y de restricciones, de ahí que otra parte de estos recursos vaya a mejorar las condiciones de todos los profesionales que trabajan en esta casa. Y no solo me refiero a la plantilla de CARTV, Aragón TV y Aragón Radio, sino a todos aquellos que trabajan aquí, como el personal de Chip Audiovisual, de Factoría Plural y de otras empresas. Hay que ir mejorando sus condiciones. Y, para terminar, otra parte de la inversión irá destinada a contenidos.
- Con todo, si se atiende a las cuentas de la CARTV en 2017 solo el 7,26% de las mismas procede de los ingresos por publicidad y otros. Parece poco, ¿no?
- Somos unos medios de comunicación públicos, cuya actividad esencial es dar un servicio público, de ahí que el núcleo duro de la financiación sea pública. Si no fuera así, nos deberíamos a unos accionistas privados y, lógicamente, tendríamos que adaptar toda nuestra parrilla a los anunciantes, lo que, en momentos determinados, podría generar conflictos. Pero no es así, somos un servicio público que se debe a los ciudadanos y que tiene que definir su programación, oferta e informativos en función de lo que ellos piden. Además, esto no quita para que no haya preocupación por los ingresos. La tenemos, claro, porque, además, al ser dinero público hay que rendir cuentas de él constantemente. Como decía,nuestra rentabilidad se mide de otra manera, se mide en el cumplimiento del contrato-programa, un documento complejo en el que se exigen numerosos aspectos cualitativos que se deben cumplir. Y todo eso condiciona las fuentes de financiación. Pero sí, también tenemos una actividad publicitaria privada, que, es verdad, supone un porcentaje pequeño de nuestra financiación. Pero tiene una doble finalidad. Por un lado, nos proporciona unos ingresos que son complementarios y, por otro, ofrecemos un servicio público en términos de espacio publicitario. Y es que muchos anunciantes, especialmente los locales, no se podrían plantear hacer anuncios en la televisión si no existiera Aragón TV. Con todo, aunque no sea algo que prime, tenemos que trabajar y mejorar estos ingresos publicitarios.
- Comentaba la necesidad de mejorar las condiciones laborales de todos los profesionales que trabajan en la CARTV. El año pasado fuimos testigo de las movilizaciones de los trabajadores de TSA, que se encargaba del mantenimiento y operación de equipos la radio y televisión aragonesa, y desde hace unos meses, de los Jueves Negros de Chip Audiovisual, que realiza los programas informativos, deportivos y El Tiempo para Aragón TV. ¿Pueden hacer algo desde la Corporación para mejorar las condiciones laborales de estos profesionales?
- No puede ser que tengamos un proyecto ilusionante y que las personas que trabajan en él no puedan realizar a gusto su trabajo. Ante esto, desde la CARTV no podemos quedarnos impasibles, al contrario, tenemos que trabajar para que esto vaya a mejor. Cuando una persona se queja, hay que analizar por qué lo hace. A priori, todas las reivindicaciones son legítimas. Otra cuestión es cómo se pueden resolver. Lamentablemente desde la CARTV no tenemos posibilidad de dar solución a todo. Somos empresas distintas y no podemos intervenir directamente en las relaciones de una firma con sus profesionales. Pero algo sí que podemos hacer. ¿Qué? Diseñar unos pliegos de contratación en los que se mejore la situación actual. De hecho, ya lo hemos hecho. Hace unos meses se adjudicó un contrato de explotación y en los pliegos del concurso ya se reflejaron una serie de requerimientos a las empresas que se presentaran para mejorar las condiciones de todos sus trabajadores, fundamentalmente, las retributivas. Nuestro margen de maniobra en este punto está en los pliegos, que recojan los recursos suficientes y unas cláusulas sociales que reflejen esa preocupación por las condiciones que tienen las personas que trabajan con las empresas con las que trabajamos.
- En cualquier caso, el modelo de gestión de esta corporación de radio y televisión ha sido muy aplaudido e incluso replicado en otras comunidades.
- En términos de estabilidad financiera y eficiencia, incluso en momentos difíciles de supervivencia para las televisiones, se puede decir que el modelo de la CARTV ha sido un éxito. Y aunque ahora mismo no estamos en las mejores cifras, porque también ha cambiado mucho el entorno y la competencia televisiva, se han conseguido cuotas de audiencia muy elevadas. Sí, tenemos un modelo de éxito, pero todo es mejorable. Y es que las cosas que funcionan bien hoy no tienen por qué hacerlo eternamente. Hay que estar pensando permanentemente cómo mejorarlo. Han cambiado muchas cosas: la normativa, el entorno competitivo y hasta las preferencias de los ciudadanos de cómo acceder a la información y al entretenimiento. Y todo ello requiere una reflexión de hacía dónde tenemos que ir y cómo trabajar.
- El próximo año salen a concurso los dos grandes lotes de contenidos –informativos y programas- de Aragón TV. ¿Queda hueco en esta programación para las productoras independientes?
- ¡Es que los grandes lotes de contenido no es todo! Hay una parte muy importante de nuestra programación que está fuera de estos y se hace con productoras independientes, que, además, hacen espacios referentes para Aragón TV, como Oregón Televisión, La pera limonera o En ruta con la ciencia. Y lo mismo ocurre con Aragón Radio. El hecho de sacar los lotes nos permite organizar la gestión de una parte importante de los contenidos de una forma más eficiente, pero eso no quita para que las productoras no tengan su sitio. De hecho, este año, Aragón TV ha incrementado un 34% la inversión en la compra de programas fuera de estos grandes lotes.
- Otra de sus apuestas ha sido reforzar el apoyo de la CARTV al audiovisual aragonés.
- Era otro de los puntos que me marqué como urgentes e importantes. Por mi trabajo en la Aragón Film Commission, conocía la situación, los proyectos y las inquietudes del sector de la producción audiovisual en Aragón. Y lo primero que hemos hecho es incrementar los fondos destinados a apoyo de proyectos a través de la línea de financiación anticipada. Prácticamente hemos duplicado el dinero, al pasar de 255.000 euros a 400.000 euros. Pero además del apoyo financiero, también queremos participar en la visibilidad de esos proyectos, con más difusión tanto en Aragón TV como en salas de cine y otras pantallas.
- Y en este apoyo al sector audiovisual, ¿veremos alguna serie de ficción producción propia de CARTV?
- Es verdad que Aragón debería tener una serie e intentar que fuera un motor más para el sector. Estamos trabajando en ello y el próximo año, esperemos que se pueda ver la primera serie de ficción de creación propia de Aragón TV.