Por María José Andrade
Es joven y sobradamente preparada. Una recién graduada en una de las ingenierías en las que hasta hace apenas unos años, las mujeres eran vistas como auténticos “bichos raros”, y en las que hoy en día, la presencia de la mujer ni se cuestiona ni se pone en duda.
Hace apenas unos meses, fue la ganadora del Concurso de Ideas de la Universidad de Sevilla. Una convocatoria en la que tuvo que medir sus fuerzas con casi doscientos proyectos más y que consiguió alzarse con el premio, gracias a una idea en la que los océanos se les quedaron pequeños.
Teresa Ramos es una mujer con talento; una de las “meli” que trabaja sin descanso por demostrar que no hay barreras para que las mujeres puedan ejercer carreras técnicas .
Ella y todo un grupo de mujeres, abanderadas de la ingeniería, demuestra, paso a paso, que hay sitio para todas, que se pueden cambiar los porcentajes y que no hay fórmula más certera que la que hace realidad ese refrán tan español que dice que “la unión hace la fuerza”.
Ella es también una “Áurea”. Una de esas jóvenes con ganas de cambiar el mundo y que, gracias a la Universidad de Sevilla y al Instituto Andaluz de la Mujer, ha encontrado en el emprendimiento un camino para poder desarrollarse personal y profesionalmente.
Para ella y para otras muchas como ella, ha supuesto un punto de inflexión para descubrir que hay miles de maneras y formas de trabajar, de crear y de proyectar ideas de negocio. Planes en los que la responsabilidad con la naturaleza, lo entornos, las ciudades y las personas, deben ser los principales instrumentos que son necesarios para construir el mundo con el todos soñamos.
Teresa es una auténtica emprendedora. Una mujer que no deja de “maquinar” y de inventar porque sabe que tiene capacidad para afrontar el hecho de que no se haga realidad lo que se proponga; y es que el fracaso es la primera palabra que hay que escribir en el diccionario del emprendedor para asumir como algo normal y mostrar como parte importante del currículum.
Almagama Desarrollo
Ahora se pone de nuevo en la línea de salida y se dispone a ayudar a jóvenes con talento que puedan desarrollar sus habilidades en proyectos sociales y locales.
Almagama Desarrollo es esta nueva aventura en la junto un equipo, en la que lo más importantes es eso precisamente el trabajo en equipo, se disponen hacer que el mundo sea más cercano y pequeño, a pesar de vivir en plena era global.
Pero ese mundo ha cambiado en estos últimos meses y se hace necesario medir fuerzas con todo lo que está ocurriendo en esta época de pandemia. Unas fuerzas que se tienen que unir para que las iniciativas que parten de la gente joven, sean las que consigan que el futuro laboral de nuestro país, sea uno de los más competitivos de Europa.
Siempre han dicho que Andalucía es la Silicon Valley de Europa y hoy, viendo cómo se esfuerzan mujeres como Teresa Ramos, creemos que no tiene porqué ser algo que no esté a nuestro alcance y se pueda hacer realidad.
Ella cree firmemente, en la colaboración porque sin la cooperación y la participación no podrán acceder a un mercado laboral que tiene que edificar ellas mismas, porque las salidas las tienen que edificar ellas.
Están convencida de que hay que trabajar de manera transversal, desarrollar las habilidades profesionales y definir los roles porque desde ahí, todos aportarán lo mejor de ellos mismo y porque, en esta carrera de fondo no gana el más rápido sino el que sabe rodearse de personas capaces de sacrificarse por los demás y dar lo mejor de sí mismos.
Teresa Ramos acaba de empezar. Comienza a percibir su profesión como una herramienta al servicio de quien lo necesite, porque sabe que hay que encontrar y dar soluciones para resolver situaciones en las el ser humano tiene que seguir sumando para ser mejor.
El proyecto Amalgama es el resultado de esta suma en la que no cabe resta alguna sino multiplicaciones que ofrecerán oportunidades de cambio y una red infinita de gente que apenas tienen miedo a nada porque a esas edades el miedo no existe.
Conocer a Teresa es percibir la energía de una mujer que tiene mucho por vivir pero que también lo ha vivido todo… Y desde esa energía y fuerza que la hace única, ella ha despejado la equis de una ecuación en la que la y griega, es el resultado en el que no hay nada que se pueda resistir a mujeres con tanto talento… Mujeres con ganas de seguir aprendiendo y unidas por un sentimiento profundo y de una solidaridad infinita que las llevarán a alcanzar, cualquier objetivo que se propongan.
