La unión hace la fuerza. Y en tiempos de turbulencias económicas mucho más. Así deben pensar los Consejos de Administración de Unicaja Banco y Liberbank, que ya han aprobado el proyecto común de fusión.
La operación supone la creación del quinto banco español por volumen de activos (superior a los 109.000 millones de euros), con calidad y solidez de balance, y con una amplia y diversificada presencia en el territorio nacional, siendo entidad de referencia en seis Comunidades Autónomas.
La nueva entidad, que mantendrá la denominación Unicaja Banco y su sede social en Málaga, nace con el objetivo de aportar valor a los accionistas, mejorando la rentabilidad, así como mejorar la oferta y calidad del servicio a los clientes y seguir apoyando la recuperación económica del país, manteniendo como valores compartidos la cercanía y la
vinculación con el territorio.
Está previsto que la entidad combinada cuente con ahorros recurrentes de costes de unos 192 millones de euros anuales, lo que permitirá mejorar significativamente la ratio de eficiencia en torno a 11 puntos porcentuales
Asimismo, la generación de sinergias permitirá incrementar el beneficio por acción de ambas entidades en aproximadamente un 50% respecto a las estimaciones del mercado para 2023. De igual manera, el nuevo grupo refuerza su posición en banca minorista en el país, con más de 4,5 millones de clientes y unas significativas cuotas de mercado de los principales productos.
La transacción está sujeta a la aprobación por parte de las Juntas Generales de accionistas de ambas entidades, así como a la obtención de las autorizaciones regulatorias preceptivas.